Identificados los matones disfrazados de Carabineros que actuaron el 30 de mayo en contra de los estudiantes.

Cuando todavía no se borran de nuestra memoria la brutal represión que los matones disfrazados de Carabineros ejercieron en contra de periodistas y de los estudiantes movilizados, que salieron a la calle a protestar por una mejor educación el pasado y fatídico martes 30 de mayo, hoy se conocen los nombres de estos cobardes agresores que, como en los mejores tiempos de la dictadura, las emprendieron a patadas, puñetes, escudazos y mechoneos en contra de cualquier mortal que se les pusiera por delante.

La Fiscal Militar Alejandra Pobrete ya recibió el informe en donde se identifica a los doce funcionarios de la policía uniformada que participaron en tan vergonzosos e indignantes hechos.

Los agresores del camarógrafo del canal regional de Concepción y Mega, Livio Saavedra, que fue golpeado en el suelo fueron identificados como el suboficial Fernando Fernández, el cabo segundo Patricio Lagos, además de los carabineros Juan Burgos, Claudio Castro y Rodrigo Parra.

El reportero gráfico del "Diario Financiero", Fernando Fiedler, casi en el mismo lugar de la agresión anterior, recibió un golpe propinado con su escudo por el carabinero Daniel Riquelme, también identificado.

Suerte similar corrieron los periodistas Marco Días, Julio Oliva e Iván Valdés, del diario "El Siglo", quienes fueron detenidos y subidos con inusitada violencia a un carro policial por el teniente Juan Carlos Morales, por el sargento Francisco Rifo y los cabos Alejandro Tralcal, Daniel Muñoz y Jorge Mendoza.

La imagen que impactó a todo Chile por su extrema violencia fue la de una adolescente - que aún no ha sido identificada - la cual, mientras huía, fue mechoneada y arrastrada tuvo como protagonista al Carabinero de Fuerzas Especiales, cabo Patricio Bravo.

Ojalá todos ellos reciban una sanción ejemplar, pero debemos recordar que todavía siguen en la impunidad los responsables políticos de la represión, escondidos en el silencio de la ignominia y detrás de sus sillones de la Intendencia y de la Subsecretaría del Interior.